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sábado, 24 de abril de 2010
¿Y si el lento transcurrir del agua en el silencio nocturno no fuera otra cosa que el desvelo de Dios su líquida conciencia aventurada en nuestra vigilia? Hugo Celati (2010) (Imagen: René Magritte)
Celebro, Hugo, la brevedad de tu poema, porque en ella, ciertamente, hay la desmesura de la interpelación que no es sino clarividencia... De "intensidad y altura", como un desamarrarse de ligaduras lacerantes y cruxificciones, como un susurro, como los "despertares blancos"... Toda mi emoción y mi agradecimiento por tu palabra dadora de poesía. Un cordial abrazo!
Gracias Querida Daniela! la búsqueda de ese equilibrio ente brevedad y desmesura es todo un desafío para el poeta...! Celebro gratamente tu lectura, tus palabras que siempre me alientan y contienen en esta aventura de escribir...me tomo de tus palabras en otro sitio y digo que también siento esto: tu mirada completa al poema...la mirada del lector que se deja llevar e interperlar por el texto y con el que (Milagro maravilloso de la poesía!) logramos comulgar... Un abrazo!
Celebro, Hugo, la brevedad de tu poema, porque en ella, ciertamente, hay la desmesura de la interpelación que no es sino clarividencia... De "intensidad y altura", como un desamarrarse de ligaduras lacerantes y cruxificciones, como un susurro, como los "despertares blancos"...
ResponderEliminarToda mi emoción y mi agradecimiento por tu palabra dadora de poesía. Un cordial abrazo!
Gracias Querida Daniela! la búsqueda de ese equilibrio ente brevedad y desmesura es todo un desafío para el poeta...!
ResponderEliminarCelebro gratamente tu lectura, tus palabras que siempre me alientan y contienen en esta aventura de escribir...me tomo de tus palabras en otro sitio y digo que también siento esto: tu mirada completa al poema...la mirada del lector que se deja llevar e interperlar por el texto y con el que (Milagro maravilloso de la poesía!) logramos comulgar... Un abrazo!